"SENTÍ UN GRAN GRITO DE LA NATURALEZA"
Resulta que el famoso cuadro "El grito", pintura expresionista de Edvard Munch, podría tener otro nombre y otra interpretación. Una especialista ha reinterpretado la frase grabada en una litografía que el propio pintor escribió. Comenta que podría conocerse más bien como "El susto", ya que no se trata de un hombre gritando sino en actitud de taparse los oídos al escuchar o emitir un grito. Los críticos del arte, los historiadores, los entendidos de la época, a finales del siglo XIX y principios siglo XX, daban por hecho que el autor pretendió mostrar un instante de dramatismo depresivo y atormentado, las nuevas circunstancias vitales que afectaban al alma y a la conciencia del hombre moderno. Pero la figura, tal como numerosos estudios la ven ahora, no es más que la plasmación de un grito, emitido o escuchado, real o fruto de la percepción íntima del artista.