sábado, 8 de agosto de 2020

MISTERIOS MISTERIOSOS

EL HECHICERO ARQUÍMEDES


Todo el mundo sabe, o debería saber, que este personaje fue un sabio e inventor que vivió en el siglo III antes de nuestra era. Se conocen pocos detalles de su vida y cómo era realmente, pero su huella permanente quedó bien visible en el estudio e investigación de materias tan diversas como las matemáticas, la física, la astronomía y la geometría. Sus teorías las llevaba a la práctica, y de ahí surgieron máquinas de guerra como las catapultas, que eran una especie de lanzamisiles, salvando naturalmente las distancias, un conjunto de espejos para prender fuego a los barcos enemigos, o un cañón a vapor. Lástima que los implacables romanos conquistaran la ciudad viniéndose todo abajo. Arquímedes no se enteró de su llegada porque estaba muy concentrado analizando unos dibujos geométricos, en mal momento, porque uno de los soldados que desconocía que se hallaba ante un gran hombre lo mató. Aunque los romanos consiguieron su conquista, no habían perdido el miedo a los inventos del que consideraban un brujo. Esta imagen ha quedado grabada de tal forma en las mentes de sus descendientes que cuando sus hijos se portan mal, les asustan con la frase: "ándate con ojo, que si no Arquímedes te raptará". ¡Ni que fuera el hombre del saco!

martes, 4 de agosto de 2020

¡QUÉ LE VAMOS A HACER!

"ES QUE LOS SORDOS SOIS UNOS PILLINES"

Hay gente que sienta opinión ante hechos y situaciones que realmente no conoce. Más de una vez he tenido la mala suerte de toparme con ellos. Hace algún tiempo tenía una perrita a la que debía sacar a pasear un rato. En cuestión de perros, surge alguna pequeña charla entre los dueños. Que si esto, que si lo otro... El propietario de otro can (no sé de qué raza... El can, no el dueño, claro), y yo coincidíamos de vez en cuando. El tipo sabía que yo tenía problemas auditivos y debía advertirle con frecuencia que adoptara una posición frontal y próxima para que yo pudiera seguir la conversación. Una de las veces se me ocurrió preguntarle si se iba con la idea de que yo no me había enterado de nada. A lo que dubitativamente, me respondió que sí, y la breve conversación siguió su curso, un poco tirante por su parte y tratando por la mía de explicarle cómo son este tipo de situaciones para las personas que tenemos discapacidad auditiva. Total que mi interlocutor, sin venir a cuento y de forma contundente me suelta: "Es que los sordos, en lugar de escuchar no queréis oír, y cuando os conviene sois unos pillines". Es decir, que oímos o entendemos lo que nos interesa y lo que nos da la gana. Tremendo error. Bastante tenemos con sortear las barreras de la incomunicación, para que un sabelotodo nos venga con esas. Más, cuando en mi caso concreto se suma a la sordera  un importante problema de visión, que fue lo que yo le dije. Pero mi interlocutor ni caso, continuaba empeñado en hacer valer su opinión. Seguía sentando cátedra sobre el comportamiento picaresco de los sordos. No está bien pensarlo, pero habría dado cualquier cosa por que tuviera que convivir unos días, solo unos días, con la sordoceguera. Sabría lo que es bueno. ¡Ni que estuviéramos aún en los antiguos tiempos de la picaresca!

sábado, 1 de agosto de 2020

SE APAGÓ UNA ESTRELLA

OLIVIA DE HAVILLAND


Ya sabe todo el mundo que alcanzó los 104 años residiendo en su adorado París, asistida últimamente por cuidadoras que una vez por semana le dejaban tomar una copita de champagne. ¿Habrá sido esa bebida burbujeante el elixir de su larga vida? Lo cierto es que De Havilland fue la última estrella en desaparecer de aquel lejano Hollywood dorado, superando por poco a otro mito del cine, Kirk Douglas. De Havilland fue la gallina de los huevos de oro de la Warner, el amor imposible de Errol Flynn, con el que protagonizó siete películas típicas de aventuras y cartón-piedra, viendo nacer el technicolor. Melanie Hamilton la catapultó a la fama y se enfrentó con la todopoderosa Warner por las clausulas abusivas de sus contratos. Ganó una demanda que ahora lleva su nombre, pero la compañía le dio un soberano bofetón bloqueando su protagonismo en "Rebeca", que haría su hermana Joan Fontaine. La rivalidad entre las hermanas también alcanzó proporciones notables. De hecho se contaba que Aldrich, se basó en ella para la película "¿Quién mató a Baby Jane?" con Davis y Crawford. Aparte de otros affaires, tuvo una relación amorosa con John Huston (extraña pareja) y ganó dos Oscars. Pero ya se sabe, el tiempo corre para todos causando estragos y los artistas se someten al dictado de los cirujanos, verdaderos costureros muchas veces, o deciden envejecer con dignidad. "Sit tibi terra levis": que la tierra te sea leve, admirada Olivia y que al menos en sueños podamos alcanzarte.