sábado, 24 de octubre de 2020

 CENTENARIO DE MONTY

“Prefiero estar solo"

Así se aludía en su entorno a Edward Montgomery Clift, de quién por estos días de octubre se ha cumplido el centenario de su nacimiento en Omaha (Nebraska). Representó junto a Marlon Brando, James Dean y otros un nuevo tipo de actor, alejado de los estereotipos anteriores, más varonil, más sensible, más rebelde, más atormentado. Clift fue una belleza de ojos verdes expresivos y melancólicos, un modelo al que Hollywood fue capaz de poner límites, mostrándose quizás menos libre e impetuoso. Diversas circunstancias marcaron su vida. Clift pronto se dedicó a la interpretación, empezando por "Río Rojo", y triunfó en varias películas que le darían la fama y el estrellato, con nominaciones al preciado "oscar". Decían que tenía una extraña vida, aunque todo lo que pretendía era alejarse del 'mundanal ruido' de las fiestas, leer buenos libros y los paseos nocturnos. Pero su destino estaba escrito. La insistencia de la Taylor para que fuera a su casa pudo más y al salir de ella borracho, empotró el  coche contra un poste telefónico. Las consecuencias fueron fatales y su hermoso rostro quedó completamente desfigurado.


domingo, 18 de octubre de 2020

VUELVA USTED MAÑANA

No se trata del célebre artículo de Larra, sino de los primeros pasos de una gran artista,

Tras la II Guerra Mundial, París empezaba poco a poco a despertar, a pesar de la destrucción y la miseria. En el barrio de Saint Germain des Prés vivía, cerca de la pensión sita en la plazoleta, una joven Juliette Greco. Había estado en prisión mientras que su madre y hermana fueron deportadas a Ravensbruck. Quería cantar, y como el barrio con sus cafés, sus teatros, sus cavas de Jazz y sus tertulias invitaba a ello, era sitio adecuado para dar sus primeros pasos. No le faltó la intuición de que tenía que escuchar a los mayores, los que más experiencia acaparaban, así que un buen día, entró en uno de esos cafés, donde estaba Jean Paul Sartre, y le pidió consejo para iniciarse en el arte de cantar, a lo que el aludido, viendo la ambición y ansias de la joven, le dijo que volviese  al día siguiente. Tras el encuentro, Juliette Greco acabó por convertirse en un icono de la canción francesa, con su atuendo negro, su movimientos para armonizar el texto con la música y su voz raspada por el fumar constante Fue la última superviviente de una gran generación de artistas, muriendo hace un mes, a los 93 años.


sábado, 10 de octubre de 2020

 UNA MUERTE TONTA

DE CUANDO LOS DIRECTORES DE ORQUESTA LLEVABAN BASTÓN


Actualmente la mayoría de los directores de orquesta usan una batuta para conjuntar las grandes formaciones orquestales. Lo hacen tras un complicado y muy difícil proceso de aprendizaje, en el que sólo llegan a la cumbre los verdaderos genios. Pero antaño la cosa no era así y, especialmente las orquestas reales y las grandes formaciones militares, iban precedidas por un elegante conductor que marcaba el ritmo con una pesada barra de metal, dando golpes en el suelo, para llevar el compás. Tan forzado equilibrio de técnica y destreza tuvo en ocasiones fatales consecuencias, como le ocurrió a Jean-Baptiste Lully, célebre músico florentino de la época de Luis XIV. En cierta ocasión el aclamado maestro estaba dando fuertes golpes en la madera del suelo, para que los músicos siguieran sus tempos, cuando en un accidente impredecible, en lugar de en la tarima, el bastón dio de lleno en el dedo gordo del pie. ¡Huyyy que dolor! Fue atendido de inmediato, pero los 'doctos doctores', de acuerdo con los escasos conocimientos médicos de la época, a caballo entre la charlatanería, la escasísima higiene y las cochinadas vertidas en ungüentos y brebajes, fueron caldo de cultivo para la infección y la gangrena, que se llevaron a la tumba no precisamente a un músico mediocre, sino más bien a uno de los grandes nombres de la música clásica.